Las Fuerzas de Seguridad de Israel confiscaron más de 1.200 cámaras ocultas ubicadas en mesas electorales para vigilar a la oposición. El primer ministro, Benjamín Netanyahu, recononció y justificó la operación ilegal.
La Policía de Israel ha confiscado más de 1.200 cámaras ocultas ilegales a activistas del partido gobernante Likud ubicados en mesas electorales de varias poblaciones del norte de ese país que cuentan con una mayoría árabe.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha confirmado que su formación política equipó a esos 1.200 observadores que empleó con estos dispositivos para asegurar “una “votación honesta”.
Por su parte, el jefe de la Comisión Electoral israelí ha presentado una denuncia a la Policía sobre la ilegalidad de esa medida, mientras que dos partidos árabes han acusado al Likud de intimidar a los votantes árabes con esta maniobra.
Israeli Police now confiscating hidden cameras & recording devices found on right wing activists in several polling stations in the Arab community. When caught they say @netanyahu’s Likud sent them pic.twitter.com/OefZe5x2Zn
— Noa Landau נעה לנדאו (@noa_landau) April 9, 2019
Bibi’s Likud party sews suspicion of Arabs exercising their very basic political right to vote, distributing 1,300 cameras to its supporters in Arab localities. The Elections Committee has ordered their removal. In the video, man admits the Likud party gave him the camera. pic.twitter.com/shipCyxrDQ
— The Mossawa Center (@MossawaCenter) April 9, 2019
מבט מתוך הקלפי עם מצלמה נסתרת שנחשפה 👇 pic.twitter.com/aZThwFKJ9O
— Tal Shalev (@talshalev1) April 9, 2019
Cabe resaltar que Benjamín Netanyahu va en busca que su quinta reelección. Semanas atrás, a cuarenta días antes de la votación, el fiscal general de Israel anunció que planea imputar al primer ministro Benjamín Netanyahu por sobornos, fraude y abuso de confianza.