A cuatro años de la primera marcha, este 3 de junio habrá movilizaciones en todo el país contra los femicidios y para pedir por el aborto legal, seguro y gratuito.
Hace cuatro años, miles de mujeres decidieron salir a la calle en todo el país para gritar ‘Ni Una Menos’ contra la violencia machista. Si bien hubo intentos de avances contra las muertes de mujeres, los datos siguen siendo alarmantes, además de que el gobierno de Cambiemos cada vez recorta más en el presupuesto para la prevención.
La movilización central de este lunes se concentrará a partir de las 17:00 horas en el Congreso de la Nación, aunque tendrá réplicas en gran parte de las ciudades argentinas.
Este lunes la Asociación Civil Casa del Encuentro difundió un informe, las cifras son claras: 3.000 mujeres, una cada 32 horas, fueron víctimas de femicidios y más de 3.500 hijos e hijas perdieron a sus madres como consecuencia de estos asesinatos, el 64% menores de edad en los últimos 11 años.
La ONG contabilizó 2.952 mujeres asesinadas por la violencia machista y 3.717 hijos e hijas que perdieron a sus madres entre el 2008 y el 2019, informó Télam.
“Lo más problemático es que en 11 años no se ha podido hacer descender el índice de violencia contra las mujeres, que se ha sostenido casi sin cambios”, dijo a Télam Ada Rico, presidenta de La Casa del Encuentro.
“Necesitamos profundizar en políticas públicas integrales, pero también el cambio cultural porque en tanto se siga considerando a las mujeres como un objeto de pertenencia, no vamos a cambiar”, agregó.
El informe mostró también que más del 62% de los femicidas fueron esposos, parejas o novios de las víctimas al momento de cometer el crimen o lo habían sido con anterioridad; mientras casi el 16% no tenían vínculo, el 11% fueron familiares, y 8% eran vecinos o conocidos.
Las estadísticas muestran también que casi el 66% de las víctimas de esta forma extrema de violencia de género tenían entre 19 y 50 años de edad.
Por otro lado, la provincia de Salta es la que concentra la tasa más alta de femicidios (13,78), seguida por Santiago del Estero (13,30) y Jujuy (11); mientras que la menor incidencia se registra en la Ciudad de Buenos Aires, con sólo 4,36 de estos crímenes cada 100 mil habitantes.
Además, entre 2008 y 2019 un total de 303 niños y hombres murieron víctimas de femicidios vinculados, es decir, fueron asesinadas al intentar impedir la agresión o con el objeto de castigar y destruir psíquicamente a la mujer que consideran de su propiedad.
Respecto a las modalidades del hecho, el 26.69% fueron baleadas; el 23,57 %, apuñaladas; y el 15,51 %, golpeadas.
En cuanto a los escenarios de los femicidios, más del 63% de los hechos se registraron en una vivienda; mientras que casi el 11 % de estos asesinatos se produjeron en el campo, terrenos descampados o parques, el casi el 8% en la vía pública y casi el 4% en ríos, arroyos, diques o zanjones.
Otros datos destacados de la investigación: el 14 por ciento de las víctimas habían denunciado previamente a sus agresores, el 3% estaban embarazadas, el 10% tenía indicios de abuso sexual, casi el 3% eran víctimas de trata o prostitución y el 4% eran migrantes.
En cuanto a los femicidas, casi 6 de cada 10 pertenecían a alguna fuerza de seguridad y el 18 por ciento del total de agresores se suicidó luego de cometer el homicidio.