Mientras un 57% de la población ya cuenta con el esquema completo, esta franja etaria preocupa al Ministerio de Salud que registra un porcentaje grande de ausentismo.
Mientras el plan de vacunación contra el COVID-19 avanza y ya se comenzó la inmunización de niños y adolescente, las personas de 18 a 40 años tiene sumamente preocupado al Ministerio de Salud de la Nación debido a que registra un muy alto porcentaje de ausentismo en la aplicación de la segunda dosis.
Uno de los últimos informes oficiales marca que el 75,4% de la población ya inició su esquema de vacunación, mientras que el 56,7% ya lo completó. Sin embrago, una gran parte de lo que aún no está protegido corresponde a la recién mencionada franja etaria.
En septiembre, durante la reunión del Consejo Federal de Salud (COFESA) en Mar del Plata, la ministra Carla Vizzotti había pedido al jefe de Gobierno porteño y a los gobernadores que redoblen el esfuerzo para lograr que estos ciudadanos completen el esquema.
“Vemos un alto nivel de ausentismo en ese grupo etario. Entre un 30 y 40% de los que tienen entre 18 y 40 años no se aplicó la segunda dosis de la vacuna”, sostienen por estas horas en el ministerio que conduce Vizzotti.
Según la última actualización del Monitor Público de Vacunación, 34.543.451 personas ya iniciaron su esquema de vacunación y 26.209.203 lo completó. Es decir que aún restan aplicar 8,3 millones de vacunas contra el coronavirus. En tanto ya hay 116.348 personas que tuvieron una dosis adicional, es decir, una tercera aplicación.
“Persiste en la sociedad una percepción de que bajó el riesgo, que la pandemia ya pasó y como tienen una dosis no van a buscar la segunda”, aseguraron desde la cartera.
De acuerdo con las cifras oficiales, en las personas que tienen entre 18 y 39 años sin factores de riesgo se aplicaron 13.911.696 dosis. Los otros rangos etarios que aún restan vacunar son niños, niñas y adolescentes, pero en estos últimos dos casos la inoculación avanza a buen ritmo. Ya se colocaron 209.590 en los chicos de entre 3 y 11 años con factores de riesgo, 2.110.862 en los que no tienen comorbilidades, 2.493.280 en los adolescentes sin riesgo y 890.554 en los que sí presentan comorbilidades.