Alejo Ramos Padilla, juez Federal, procesó a Carlos Omar el “Cabezón” Rodríguez por “promoción y facilitación, y explotación económica de la prostitución”, en el emblemático caso de la joven platense Johana Ramallo
Alejo Ramos Padilla, titular del juzgado Federal N°1, procesó a Carlos Omar el “Cabezón” Rodríguez por “promoción y facilitación, y explotación económica de la prostitución”, en el emblemático caso de la joven platense Johana Ramallo, desaparecida y asesinada años atrás.
El fallo y la investigación llevada adelante por Ramos Padilla fueron contextualizadas bajo una perspectiva de género, lo que permite entender según el juez que la joven Johana Ramallo, quien ejercía la prostitución sumisa en un contexto de vulnerabilidad absoluta, fue víctima de Carlos Omar el “Cabezón” Rodríguez, quien la “regenteaba”, entre otros delitos y abusos que cometía.
De esta manera el fallo es histórico entendiendo que es uno de los primeros en el país en enmarcarse dentro de una perspectiva de género, en donde la mujer calificada como “prostituta” pasa a ser “víctima ”y se evalúa el contexto y no solo el hecho.
Para el magistrado, “la muerte sospechosa de criminalidad que tuvo como víctima a Johana Ramallo desata una serie de obligaciones del Estado argentino y del sistema de justicia en particular que rigen en materia de violencia contra las mujeres”. En ese sentido, “se han considerado como contextos femicidas los crímenes asociados a la violencia sexual, los crímenes cometidos en contexto de criminalidad organizada, tales como la trata de personas o el tráfico de estupefacientes”.
“Se advierte que la actividad de la zona roja excede el simple ejercicio de la prostitución callejera y da cuenta de la presencia de una organización que, al menos en determinados casos y, cuanto menos, captaba y recibía mujeres con el fin de someterlas a un circuito de explotación sexual y consumo de estupefacientes, aprovechándose de su situación de múltiples vulnerabilidades: sociales, económicas, familiares, de salud física y psíquica”, expresa el fallo.
Es así como, para Ramos Padilla “el complejo escenario de comercio y abuso en el consumo de estupefacientes, de explotación sexual de mujeres y de violencia conformaron las condiciones de posibilidad para que esa desaparición y muerte ocurrieran”.