Tras varios días de negociaciones con el sector agrario, el ministro de economía anunció el nuevo mecanismo que regirá hasta el fin del mes de septiembre.
En la noche de ayer, el ministro de Economía Sergio Massa anunció la implementación de un nuevo régimen para la exportación de soja. El mismo tendrá vigencia hasta el 30 de septiembre y presenta como principal medida un tipo de cambio “especial”.
El decreto 576 de necesidad y urgencia, que lleva la firma de Alberto Fernández, así como también la de los ministros del Gabinete, establece el “Programa de Incremento Exportador”, que incluye a la soja y a sus subproductos.
De esta manera, las exportaciones de la oleaginosa se liquidarán hasta el 30 de septiembre a un tipo de cambio de $200. SEl programa aplica a quienes hayan realizado exportaciones en los últimos 18 meses. La adhesión al sistema es voluntaria y se hace vía el “Sistema Registral” disponible en la AFIP.
En una conferencia de prensa desde la cartera de Hacienda, el funcionario aseguró que “el acuerdo establecido prevé u$s5000 mil millones de liquidación para septiembre”. Y agregó que “u$s1.000 millones ingresarán en las primeras 72 horas”.
Además, adelantó que el Decreto de Necesidad y Urgencia “prevé que aquellos productores que adhieran en más del 85% de su tenencia a este programa van a poder tener la posibilidad de seguir participando con nosotros en programas de beneficios”.
De acuerdo al decreto, también se creará el “Fondo incremento exportador” con la finalidad de “una prestación monetaria extraordinaria no contributiva y de alcance nacional que asegure una adecuada alimentación para las personas en situación de extrema vulnerabilidad”.
Ante esto, el Gobierno deberá emitir unos $600.000 millones para pagar a los productores el nuevo precio del dólar soja mejorado que empezará a operar desde este lunes, una cifra que el Banco Central se comprometió a absorber para evitar que esa masa de pesos circulante tenga algún impacto luego en la inflación.
Según mencionó luego de la conferencia de prensa el presidente del BCRA Miguel Pesce, la autoridad monetaria utilizará sus instrumentos habituales de esterilización, lo que implicaría, en todo caso un reajuste en la tasa de interés para lograr ese cometido.