El capitán de la selección Argentina abrió el marcador para el PSG ante Benfica, pero no pudo terminar el partido y encendió las alarmas.
Este miércoles se jugó una nueva jornada de la UEFA Champions League que tuvo al Paris Saint-Germain de Lionel Messi como un de sus platos fuertes. Y el capitán de la Albiceleste se despachó con un golazo para abrir el marcador ante el Benfica de Enzo Fernández.
Sin embargo, los dirigidos por Gaultier no pudieron mantener el resultado e igualaron 1-1 en condición de visitante contra el conjunto portugués. Ahora, ambos comparten la punta del Grupo H que también cuenta con la Juventus de Italia y el Maccabi Haifa de Israel.
El astro argentino puso en ventaja a su equipo a los 21 minutos de la primera parte luego de una buena jugada colectiva del big three parisino compuesto por Messi, Mbappé y Neymar, y una mejor definición de la Pulga que encendió las alarmas sobre el final del encuentro.
Parado en el borde del área, tirado hacia la derecha, Messi abrió el pie izquierdo y envolvió la pelota para llevarla al ángulo superior derecho del arquero Odysseas, que sólo pudo oficiar de testigo de la genialidad.
No obstante, una jugada encendió las alarmas en Francia y en la selección argentina: cuando encargó hacia el arco, pareció faltarle chispa para completar la acción y el remate. Enseguida fue reemplazado, a 10 minutos del final, por el entrenador Christophe Galtier, y el rosarino le susurró algo al oído. Todo parece indicar que sufrió un tirón y habrá que ver si eso le impide jugar el sábado ante el Reims por la Ligue 1.