Los diputados de Juntos por el Cambio protagonizaron una escándalo, cual barra bravas, en el Congreso.
Fernando Iglesias, Cristián Ritondo y Waldo Wolff fueron los principales Diputados con una misión clara. El objetivo era suspender la sesión especial, y lo consiguieron a los gritos, agresiones e inclusive golpeando los escritorios y bancas.
Entre las tantas actitudes bochornosas que protagonizaron los diputados macristas, Ritondo se llevó el premio de el más ridículo. Hizo un gesto obsceno mientras se retiraba del recinto.
“Sentí fue vergüenza pero lo que importa es calificar lo que se vivió: fue una acción golpista antidemocrática”, aseguró la diputada peronista Blanca Osuna sobre el obseno gesto de Cristian Ritondo, presidente del bloque del PRO.
“Se dio inicio con el quórum correspondiente y no hay antecedentes de interrupción de una sesión que comenzó a derecho”, agregó.
Y fue muy dura con su colega macrista: “El gesto de Ritondo dio asco y vergüenza. Se debe hacer cargo JxC. Deben pedir disculpas y contribuir para que la Cámara siga trabajando como corresponde”.