El grupo inversor que llegó a Argentina con el respaldo del Gobierno para impulsar las sociedades anónimas deportivas, ha declarado la quiebra y está liquidando sus activos, incluidos clubes de fútbol reconocidos.

El gigante inversor norteamericano 777 Partners, que llegó al país de la mano de Daniel Scioli para promocionar las sociedades anónimas deportivas (SAD), está al borde del colapso. El grupo, que tenía acciones en varios clubes de fútbol de renombre, declaró la quiebra y puso todo a la venta, desde sus participaciones en equipos hasta yates de lujo y jets privados.

De acuerdo con el portal Josimar Football, el fondo enfrenta una crisis financiera sin precedentes, que lo llevó a desalojar sus oficinas en Miami y Newport Beach por no pagar alquileres, y también perdió su control sobre el equipo de baloncesto London Lions en Inglaterra. Pero el golpe más duro lo sienten los clubes de fútbol donde 777 Partners tenía participación mayoritaria.

¿Qué clubes están en riesgo tras la caída del grupo 777 Partners?

La lista de clubes que están viendo tambalear sus estructuras es larga. En Brasil, por ejemplo, una decisión judicial le quitó al grupo el control del Vasco da Gama, que ahora vuelve a ser manejado por sus socios tras quedarse 777 con solo el 30% de las acciones. Lo mismo ocurre con el Standard de Lieja en Bélgica, donde los activos del grupo fueron embargados tras una demanda del anterior dueño.

Otros clubes como el Genoa en Italia, el Hertha Berlín en Alemania, el Sevilla FC en España y el Red Star FC en Francia, también están a la venta. Y en Inglaterra, la participación de 777 Partners en el Everton FC quedó manchada por una sanción en la Premier League por incumplir el fair play financiero.

El sueño argentino de las SAD, destrozado

En Argentina, 777 Partners fue recibido con bombos y platillos por el entonces secretario de Deportes, Daniel Scioli, como parte de su apuesta por las sociedades anónimas deportivas (SAD). Sin embargo, lo que parecía una oportunidad para revolucionar el fútbol argentino, se desmorona con la caída del fondo.

El grupo, que nació en Miami en 2015 y rápidamente creció comprando clubes en todo el mundo, ahora es un ejemplo de cómo un imperio financiero puede derrumbarse en un abrir y cerrar de ojos. La quiebra no solo afecta al deporte, sino también a los socios y fanáticos que confiaron en este modelo de gestión.

Un final caótico para un gigante del deporte

777 Partners, que alguna vez poseyó la totalidad del Genoa y tenía participaciones en equipos de Europa, América y Australia, no pudo sobrevivir a las demandas por fraude y las enormes deudas acumuladas. Ahora, con todos sus activos en venta, el sueño de crear un nuevo modelo de gestión en el deporte se desvanece.