El órgano que depende del Ministerio de Justicia hizo lugar a una impugnación presentada por Andrés Fassi, presidente de Talleres.
La Inspección General de Justicia (IGJ) ha propinado un duro golpe a Claudio “Chiqui” Tapia y su gestión en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). En respuesta a una demanda presentada por Andrés Fassi, presidente de Talleres de Córdoba, la IGJ ha suspendido la asamblea de la AFA, programada para el 17 de octubre de 2024, en su sede de Viamonte 1366.
Esta decisión judicial no solo impide la reelección de Tapia, sino que también pone en duda varios proyectos clave de su gestión. Entre ellos, se encuentra la posibilidad de anular los descensos en la temporada actual y la ampliación de la Primera División a 30 equipos en 2025. Además, la IGJ ha ordenado la designación de veedores para supervisar el proceso electoral, lo que representa una pérdida de autonomía para la AFA.
La disputa entre Tapia y Fassi ha escalado en los últimos meses, con el presidente de Talleres denunciando irregularidades en la gestión de la AFA y cuestionando la imparcialidad de algunos arbitrajes. El fallo de la IGJ representa una victoria para Fassi y pone en jaque el liderazgo de Tapia al frente del fútbol argentino.
Otro de los puntos clave del fallo es la prohibición de anular los descensos en la temporada actual. Esta decisión frustra uno de los planes de Tapia, que buscaba modificar el formato del torneo para favorecer a ciertos equipos.
Asimismo, la IGJ ha puesto en duda la ampliación del número de equipos en la Primera División. Este proyecto, que contaba con el respaldo de varios dirigentes, buscaba aumentar la competitividad del torneo y generar mayores ingresos.