El histórico enfrentamiento fue presenciado por 80.000 personas en vivo.
La reciente pelea entre Mike Tyson y Jake Paul no solo generó una gran expectativa en el mundo del boxeo, sino que también dejó cifras económicas impresionantes. El evento, celebrado en el AT&T Stadium de Arlington, Texas, con capacidad para 80.000 espectadores, marcó el regreso al cuadrilátero de Tyson tras 20 años de retiro, y consolidó a Paul como una figura clave en el espectáculo deportivo moderno.
Aunque las entradas continuaron vendiéndose hasta último momento, la transmisión del combate a través de Netflix permitió a millones de personas disfrutar del evento desde sus hogares.
Según los reportes oficiales que se realizaron luego de la finalización, el enfrentamiento generó una recaudación cercana a los u$s80 millones, una cifra que confirma el atractivo global de ambos contendientes.
Las ganancias individuales también fueron notorias. Mike Tyson, quien en su apogeo llegó a ganar hasta u$s30 millones por pelea, obtuvo aproximadamente u$s20 millones por esta participación. Por su parte, Jake Paul, en declaraciones previas al combate, aseguró: “Estoy aquí para ganar u$s40 millones y noquear a una leyenda”.
El evento no escatimó en opciones para los asistentes. Las entradas estándar oscilaban entre u$s69 en las gradas superiores y hasta u$s32.392 por asientos premium en el piso.
Además, los paquetes VIP ofrecieron experiencias personalizadas valoradas entre 5.000 y 25.000 dólares, mientras que la exclusiva MVP Owner’s Experience alcanzó un precio de u$s2 millones.