“Chiquito” sufrió una sinovitis que le impidió terminar el entrenamiento y todo indicaría que se pierde el duelo ante Independiente.

Sergio Romero volvió a generar preocupación en el entorno de Boca Juniors. El arquero se vio obligado a abandonar el entrenamiento de este jueves debido a una sinovitis en una de sus rodillas, lo que encendió las alarmas a pocos días del último partido de la Liga Profesional ante Independiente.

La lesión de Romero reaviva las dudas sobre su estado físico, ya que el arquero cuenta con un historial de problemas en las rodillas. Antes de debutar con la camiseta xeneize, debió someterse a una cirugía en una de ellas, y también sufrió molestias similares durante su paso por el Venezia.

A pesar de que Leandro Brey estaba previsto como titular para el encuentro ante el Rojo, la nueva lesión de Romero complica aún más el panorama. El cuerpo médico de Boca evaluará al arquero en las próximas horas para determinar si podrá estar presente al menos en el banco de suplentes.

La situación de Romero se suma a la incertidumbre que rodea al futuro del plantel. El arquero, cuyo contrato finaliza a fin de año, no continuará en el club. Además, Boca deberá definir la continuidad de otros jugadores y buscar refuerzos para la próxima temporada.

En este contexto, el partido ante Independiente cobra una relevancia menor en términos de clasificación. El Xeneize ya no depende de sí mismo para asegurar un lugar en la Copa Libertadores 2025 y su futuro en el próximo torneo continental dependerá de los resultados de otros equipos.

Más allá del resultado del partido ante Independiente, la principal preocupación en Boca es la recuperación de Romero y la búsqueda de un arquero que pueda competir con Brey en la próxima temporada. Los nombres de Washington Aguerre, Guido Herrera y Brayan Cortés suenan como posibles refuerzos para el arco xeneize.