Los expertos descartaron la presencia de drogas y alcohol en el cuerpo del astro, y describieron el deterioro de sus órganos.
El juicio por la muerte de Diego Maradona continúa su curso, con una nueva ronda de testigos que aportaron detalles sobre el estado de salud del astro y los análisis toxicológicos realizados tras su fallecimiento.
En la séptima audiencia, los fiscales Patricio Ferrari y Cosme Iribarren convocaron a cuatro peritos para declarar ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°3 de San Isidro: Ezequiel Gustavo Ventosi, perito en bioquímica; Silvina de Piero, perito anatomopatóloga; Alejandro Ezequiel Vega, médico legista, y Sebastián Zavala, perito de la Policía Científica.
Ezequiel Gustavo Ventosi, perito de la Policía Científica, reveló que las muestras de orina y sangre de Maradona no mostraron rastros de alcohol etílico, cocaína, marihuana, éxtasis ni anfetaminas. Además, Sebastián Zavala confirmó que no se realizaron pericias sobre el cabello del astro.
Silvina de Piero, perito anatomopatóloga, detalló el estado de los órganos de Maradona, destacando lesiones de grasa en el hígado compatibles con cirrosis, alteraciones en el riñón y una necrosis tubular aguda. Sobre el corazón, que pesaba 503 gramos (el doble de lo normal), señaló que presentaba un edema compatible con una isquemia cardíaca. También mencionó una patología pulmonar crónica compatible con insuficiencia cardíaca.
Alejandro Ezequiel Vega, médico legista, corroboró las patologías observadas por su colega, confirmando la cirrosis hepática, el corazón enfermo, la enfermedad renal de base y la hemorragia pulmonar. Además, señaló que el abdomen de Maradona contenía más de tres litros de líquido que no podía eliminar.