La salida del Kily González en Unión se suma a una larga lista de DTs que no lograron sostenerse en el voraz fútbol argentino.

La fecha 13 del Torneo Apertura aún no concluye, pero ya se cobró una nueva víctima en el banquillo. Antes de que Unión visite a Defensa y Justicia este martes, el club santafesino anunció a través de sus redes sociales que, de “común acuerdo”, Cristian “Kily” González dirigirá su último partido y dejará de ser el entrenador del Tatengue.

Si bien los resultados habían puesto en tela de juicio su continuidad en las últimas semanas, la salida del ex mediocampista resulta llamativa, ya que, detrás de Eduardo Domínguez, era el técnico con mayor tiempo en el cargo, habiendo asumido en junio de 2023. En total, sin contar el encuentro de hoy, dirigió 77 partidos, con un saldo de 25 victorias, 25 empates y 27 derrotas.

La partida del Kily González se suma a la de Pedro Troglio, quien dejó Instituto la fecha pasada tras caer 3-2 ante Atlético Tucumán, elevando a doce la cantidad de entrenadores que abandonaron sus equipos desde el inicio del Apertura, una tendencia que se ha intensificado en las últimas jornadas.

Una semana antes, Alexander Medina había renunciado a Talleres luego de la derrota 1-0 frente a San Pablo en el debut de la Copa Libertadores. La salida del “Cacique”, que según informó el club fue de “común acuerdo”, contrasta con las demás, ya que, a pesar de su flojo rendimiento actual, hace menos de un mes se había consagrado campeón de la Supercopa Internacional al vencer a River por penales en Asunción.

La exigencia del fútbol argentino, con un calendario apretado que a muchos equipos les impidió tener semanas completas de entrenamiento, acelera las decisiones y, como es habitual, los malos resultados suelen ser el detonante para la salida de los directores técnicos. La particularidad de este torneo es la marcada reducción en la duración de los ciclos.

En tan solo dos fechas, Marcelo Méndez, quien había asumido en Gimnasia en abril de 2024, dejó su cargo y fue reemplazado por Diego Flores. Una jornada después, Facundo Sava presentó su renuncia en Atlético Tucumán, y posteriormente Belgrano rescindió el contrato de Walter Erviti tras apenas cuatro partidos al frente del equipo.

El caso de Erviti fue el más sorprendente, ya que había sido contratado para esta temporada, mientras que Méndez y Sava ya estaban en sus respectivos clubes desde el año anterior.

Tras estas salidas, la situación no se estabilizó. Semanas después, Adolfo Pedernera regresó a la Reserva de Godoy Cruz, y el clásico rosarino provocó el despido de Mariano Soso de Newell’s. Para reemplazarlo, la Lepra eligió a Cristian Fabbiani, quien renunció a su buen presente en Deportivo Riestra para asumir el desafío en el club rosarino.

Sebastián Domínguez logró mantenerse ocho fechas en Vélez a pesar de sumar solo dos puntos, hasta que su salida se concretó tras una derrota ante Huracán. Andrés Yllana, quien había logrado el ascenso con Aldosivi, se fue después de dos empates y siete derrotas. Otro de los últimos en dejar su cargo fue Raúl Antuña, quien tras un comienzo irregular en San Martín de San Juan fue reemplazado por Leandro Romagnoli.