La fiscal, por su parte, pidió 15 años para el agresor y 14 para su pareja, en un caso que conmociona a la política argentina.

La querella de la exvicepresidente tampoco pudo acusar a Carrizo. La decisión sobre esto sería parte de la estrategia judicial para intentar desarmar la idea de que el intento de asesinato fue parte de un grupo de jóvenes y apuntar a que detrás del hecho hubo un supuesto poder político, una teoría que la querella busca probar desde el inicio del juicio.

En cuanto a los otros dos acusados, Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, la querella pidió “15 años de prisión para ambos”. Se espera que la Justicia defina las condenas en los próximos días, en una de las sentencias más esperadas de los últimos años.

La fiscal Baigún, por su parte, solicitó ayer “15 años para Sabag Montiel y 14 para Uliarte”, en un pedido que fue menor al de la querella pero que busca una dura condena para ambos acusados.

En el caso de Sabag Montiel, la fiscal pidió que se unifique la pena a “19 años” teniendo en cuenta los cuatro a los que ya fue condenado por la venta de videos de pornografía infantil, una pena que podría complicar aún más la situación del agresor.