En total, entre sueldos, cláusulas, derechos de imagen y otros extras, la llegada y salida de “Pintita” le costará a Boca unos millones. Toda la información.
La derrota ante River volvió a cobrarse una víctima en el banco de Boca. Esta vez, la decisión recayó sobre Fernando Gago, quien fue despedido por el presidente del club, Juan Román Riquelme, apenas horas después del Superclásico. Pero la salida no será gratis: según trascendió, el vínculo roto costará al Xeneize cerca de 3,5 millones de dólares.
“Hasta acá ha llegado Fernando Gago y su cuerpo técnico con la institución. No ha sido fácil, pero tomamos la decisión con tranquilidad”, confirmó este lunes Mauricio “Chicho” Serna, integrante del Consejo de Fútbol. La decisión se tomó “ayer hasta altas horas de la noche”, explicó el dirigente, en una conferencia improvisada tras el sacudón que volvió a exponer las internas de la conducción azul y oro.
El despido no solo encendió la burla de los hinchas rivales —por cortar el ciclo tras un nuevo revés ante el clásico rival— sino que también generó un impacto económico importante. Gago tenía contrato hasta fines de 2026, y según fuentes cercanas al club, no piensa resignar ni un dólar del acuerdo que firmó. El monto neto que Boca debería pagarle ronda los 2,5 millones, aunque ya se le habrían abonado unos 700 mil, por lo que el saldo a pagar sería de aproximadamente 1,8 millones de dólares.
Pero eso no es todo: a ese número se le suman los 500 mil dólares que Boca ya había desembolsado por la rescisión de su contrato con Chivas de Guadalajara, en México. Una cifra que inicialmente pagó el propio entrenador y que luego fue reembolsada por el club argentino.
En total, entre sueldos, cláusulas, derechos de imagen y otros extras, la llegada y salida de “Pintita” le costará a Boca unos 3,5 millones de dólares, en un ciclo de apenas 30 partidos (17 triunfos, 6 empates y 7 derrotas) y sin títulos.
La salida de Gago también se suma a una larga lista de técnicos que no lograron terminar sus contratos bajo la gestión Riquelme. Desde su llegada como vicepresidente primero con Jorge Amor Ameal y luego como presidente, ningún entrenador finalizó su vínculo. Todos, desde Miguel Ángel Russo hasta Hugo Ibarra, pasaron por la guillotina del Consejo de Fútbol.
Por ahora, el equipo será dirigido por Mariano Herrón, aunque Riquelme ya habría definido a su reemplazante: el elegido es Cristian “Kily” González, quien viene de dirigir a Unión con un 42% de efectividad. En las próximas horas habría una reunión final para sellar su incorporación, con chances de que debute esta misma semana ante Tigre.
Mientras tanto, en Brandsen 805 saben que echar a Gago no solo generó ruido en lo deportivo y lo político. También fue, otra vez, una decisión millonaria.