El Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios de la Provincia de Buenos Aires resolvió admitir la acusación en su contra y la magistrada quedó a un paso de ser destituida.

El futuro de la jueza Julieta Makintach, apartada del juicio por la muerte de Diego Maradona, se complicó aún más este martes. El Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios de la Provincia de Buenos Aires resolvió admitir la acusación en su contra y la magistrada quedó a un paso de ser destituida. La decisión es un duro golpe para la defensa de la jueza, que había presentado varios pedidos de nulidad y suspensiones.

La decisión fue tomada en el Salón Dorado del Senado bonaerense tras “una audiencia cargada de tensión”. Pese a “la batería de planteos de nulidad, recusaciones y pedidos de suspensión”, los miembros del jurado desestimaron las defensas de Makintach y dieron curso a la acusación, en un revés que su defensa no esperaba.

Desde ahora, la magistrada queda sometida a proceso disciplinario, continuará suspendida en sus funciones y con una reducción del “40% de su salario”, una medida que busca agilizar la investigación y evitar que la jueza pueda seguir en su cargo mientras es investigada.

Apenas conocida la resolución, el abogado Darío Saldaño, defensor de Makintach, anticipó que recurrirá a la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN). El recurso se sustentará en la reserva federal que la magistrada ya había planteado en todos sus escritos, denunciando violaciones al debido proceso, al principio de juez natural y a la igualdad ante la ley, una estrategia que la defensa busca explotar al máximo para evitar el juicio político.

Apenas conocida la resolución, el abogado Darío Saldaño, defensor de Makintach, anticipó que recurrirá a la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN). El recurso se sustentará en la reserva federal que la magistrada ya había planteado en todos sus escritos, denunciando violaciones al debido proceso, al principio de juez natural y a la igualdad ante la ley.