Aunque el Muñeco eludió criticar directamente al árbitro Yael Falcón Pérez, sus palabras apuntaron a las estructuras del fútbol argentino. Gallardo dejó un mensaje contundente sobre el “sistema” arbitral que, según él, condiciona los partidos y sanciona a quienes se atreven a hablar.
Marcelo Gallardo no pudo ocultar su malestar en la conferencia de prensa posterior a la caída de River por 2-1 ante Rosario Central en el Gigante de Arroyito, un encuentro que estuvo plagado de controversias arbitrales. Lejos de señalar a Falcón Pérez, el entrenador prefirió enviar un dardo a las altas esferas del fútbol.
“Prefiero no hablar puntualmente del arbitraje de esta noche. No voy a ser el único que siempre hable de esto, porque te quedás muy solo”, comenzó el Muñeco. Sin embargo, esta aparente calma dio paso a su verdadera queja: “Hay que adaptarse al sistema. Nos pasa a todos. Muchos callan, otros hablan, pero el sistema está así”.
El DT de River marcó una clara disconformidad con el funcionamiento general del arbitraje y las consecuencias que enfrentan los entrenadores que se pronuncian. “El que habla es sancionado”, aseguró Gallardo.
El entrenador admitió la posibilidad de errores humanos, pero cuestionó la recurrencia de las decisiones polémicas. “Los árbitros se equivocan, hoy para uno, mañana para otro, pero cuando se repite tanto, genera sospechas. Eso es lo que no me gusta”, sentenció. Aunque no nombró a la AFA de forma explícita, sus palabras se dirigieron a las estructuras que, a su juicio, influyen en el desarrollo de los partidos.
En el análisis deportivo, Gallardo reconoció que la expulsión de Portillo cambió por completo el encuentro. “Dimos un paso adelante en varios aspectos, y con un hombre menos”, destacó el DT.
El entrenador pidió mayor inteligencia a sus jugadores para manejar los momentos críticos. “Nos pusimos en ventaja y jugamos con decisión, pero otra vez nos toca quedarnos con diez. Tenemos que ser más inteligentes, aprender a manejar estos momentos”, afirmó. Finalmente, lanzó un tono crítico a sus dirigidos: “No hace falta que te cobren un penal para saber cuándo te están condicionando. Hay que tener templanza, porque perder la cabeza genera consecuencias”.
Gallardo cerró con un mensaje de advertencia sobre el futuro del deporte: “Vamos a seguir trabajando, pero el sistema debería mejorar si queremos un fútbol más justo”.