El ayatolá Jamenei responde a Donald Trump y subraya que su nación “nunca se rendirá a los dictados de nadie” en el conflicto con Israel.
Irán ha lanzado una contundente advertencia: “cualquier intervención” de Estados Unidos en la escalada con Israel desataría “una guerra total” con “daños irreparables” en toda la región. Estas declaraciones llegan como una réplica directa a los comentarios de Donald Trump, a quien el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei, aseguró este miércoles que su país “nunca se rendirá a los dictados de nadie”.
“La nación iraní se opone firmemente a una guerra impuesta, como se opondrá firmemente a una paz impuesta. Esta nación nunca se rendirá a los dictados de nadie“, afirmó Jamenei, según un comunicado oficial difundido por la televisión estatal. Sus palabras responden al llamamiento previo del presidente Trump a una “rendición incondicional” de Teherán.
El líder iraní fue enfático al advertir: “Los norteamericanos deben saber que cualquier intervención militar por su parte implicará daños irreparables“, y sentenció que su país “no responde bien a las amenazas”. Reiteró Jamenei en el comunicado: “Las personas inteligentes que conocen Irán, la nación iraní y su historia nunca le hablarán a esta nación con un lenguaje amenazante porque la nación iraní no se rendirá“.
Washington Alerta sobre Ataques de Irán y la Paciencia de Trump “Se Agota”
Previo a estas declaraciones del ayatolá, el vocero del Ministerio de Exteriores de Irán, Esmail Baghaei, ya había alertado en una entrevista con Al Jazeera English que “cualquier intervención estadounidense sería la antesala de una guerra total en la región”.
Funcionarios de Estados Unidos, citados por The New York Times, sostuvieron que “Irán estaba preparando ataques contra las bases estadounidenses en Oriente Medio” en caso de que Washington decidiera involucrarse en el conflicto para defender a Israel. Según informes de inteligencia, estos ataques serían perpetrados por hutíes yemeníes contra los buques ubicados en el mar Rojo. Además, Irán también podría “minar el Estrecho de Ormuz”, una maniobra que dejaría atrapados buques de guerra estadounidenses en el Golfo Pérsico, según los funcionarios.
El presidente Donald Trump, por su parte, había exigido el martes 17 de junio la “rendición incondicional” de Irán, advirtiendo que la paciencia de Estados Unidos se está agotando. Sin embargo, aclaró que no asesinarán al líder iraní “por ahora”. “Sabemos exactamente dónde se esconde el llamado ‘Líder Supremo’. Es un blanco fácil, pero está a salvo allí. No vamos a eliminarlo (¡matar!), al menos no por ahora“, declaró Trump en una publicación de Truth Social. Y concluyó su mensaje: “Pero no queremos que se disparen misiles contra civiles ni soldados estadounidenses. Nuestra paciencia se está agotando. ¡Gracias por su atención a este asunto!“.